COMERCIO Y TURISMO:
Hoy nos llega un testimonio que nos ha dejado completamente perplejos, unos compañeros de la Facultad de Comercio y Turismo nos relatan la realidad que llevan viviendo durante estos más de dos meses. Nos hacen patente los estragos que todo esto está haciendo que incluso pierdan la ilusión puesto que es mayor el peso de la ansiedad, la frustración y la inseguridad, que la pasión con la que día tras día durante el tiempo que llevan estudiando.
Aún con todo, han intentado sacar fuerzas de flaqueza, han intentado salir adelante porque son conscientes que si no lo hacen ellos, nadie lo va a hacer en su nombre y perderían mucho más que un curso académico.
Reconocen que psicológicamente es algo que les ha pasado factura, aunque no quieren dar la batalla por perdida, pero en muchas ocasiones son más las ganas de tirar la toalla porque están con DEPRESIÓN Y ANSIEDAD, puesto que para muchos de ellos, el simple hecho de levantarse e ir a clase suponía una vía de escape, una manera de sentirse útil para esta sociedad en la que nos movemos todos, y ven como todo eso se ha truncado sin que nadie les pidiera permiso ni opinión, han tenido que adaptarse de forma automática como si se trataran de robots a una situación que a todos se nos ha ido de las manos.
Lo peor de todo esto, es la incertidumbre que está generando esta situación y la propia Universidad, que en vez de facilitar las cosas y de ser de apoyo para sus alumnos, en muchos casos ha sido totalmente lo contrario, pues es cierto que cada uno tiene sus propias circunstancias, pero parece que las de los alumnos son las que nunca tienen valor alguno, por ejemplo; en el caso que a continuación vamos a exponer este compañero/a tiene un familiar que a diario por su trabajo se ve expuesto al tener un trabajo esencial, por lo que los familiares que lo rodean deben tener aún más precaución, no sólo ya por su familiar, sino para que el mismo pueda desempeñar su trabajo y que no lo pierda.
"Hace dos meses, de la noche a la mañana, cesaron las clases en la Facultad de Comercio y Turismo. Algo se veía venir dado que los estudiantes chinos tenían autorización justificada para faltar a las clases.
Sin embargo, seguíamos yendo a las clases, arriesgándonos a estar en clases multitudinarias. A partir del día que anunciaron la suspensión de clases, al siguiente día debíamos seguir yendo a clases.
Desde el día de la suspensión hasta el día de hoy nos hemos visto envueltos en una situación precaria por parte de la Universidad. Nos exigen constancia y productividad, en un entorno que apenas podemos avanzar y, en algunos casos, hemos tenido que paralizar temporalmente debido a distintas circunstancias (enfermedad, ansiedad, depresión, fallecimiento de algún ser cercano, etc.), pero ello sólo se ven como excusas para quienes están encima de los estudiantes y se olvidan de que nosotros también somos personas.
En el caso de un estudiante de último curso del Grado de turismo, nos cuenta su testimonio y es que se ve perjudicado anímicamente debido a las circunstancias actuales, creándole mayor ansiedad y depresión; en consecuencia, ha tenido que paralizar la realización de su TFG de manera ocasional y, por tanto, no podrá entregar el Trabajo en la convocatoria ordinaria, la cual han retrasado, apenas 15 días (como el resto de cuestiones a evaluar del curso académico en la Facultad de Comercio y Turismo).
El retraso del curso académico de 15 días se avisó en el primer mes de confinamiento, pero no fue confirmado, tanto las convocatorias de TFG como prácticas curriculares, sino hasta el 17 de Abril que se dio por confirmado el nuevo calendario de exámenes y, por tanto, de entrega de actas.
En cuanto a las prácticas curriculares, hasta el mes de abril no se dieron a conocer opciones para seguir realizando las mismas. Se conoce que la Facultad seguía apostando por unas prácticas presenciales, sabiendo que la exposición a estar frente al cliente podría causar mayores inconveniente y posibles contagios (la mayoría de las prácticas que se realizan en el Grado de Turismo deben realizarse de manera presencial y de cara al público). Sin embargo, a partir del 17 de Abril se nos confirmó que se estaban buscando prácticas para los alumnos de manera telemática que, como he mencionado antes, es prácticamente imposible en las circunstancias actuales.
A partir del 29 de Abril, se enviaron las medidas que se tomarían con respecto a las prácticas que son las siguientes:
- Prácticas iniciadas y lleguen al 50% de las horas: se evalúan a través de una memoria de prácticas.
- Prácticas que no lleguen al 50% o no se hayan podido realizar:
a)Realizar práctica por teletrabajo: llegando al 50% de las horas, con un plazo máximo hasta el 15 de Septiembre.
b)Anulación de matrícula antes del 10 de Mayo.
c)Solicitar reconocimiento de créditos por actividades de formación o actividades laborales para cubrir las prácticas externas (prácticas curriculares o extracurriculares, talleres de empleabilidad y otras actividades de formación). Estos talleres de empleabilidad no fueron anunciados sino hasta el 5 de mayo, 5 días antes de la finalización del plazo de anulación de matrícula.
Además, se tiene conocimiento de que la Facultad estaba buscando prácticas telemáticas para los estudiantes a través de la web "Linkedin" (archivo adjunto)"
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